El incremento masivo de migrantes que ahora llevan como destino el suelo canadiense, ha provocado incertidumbre política en aquel país.
La frontera entre EE.UU. y Canadá, presenta niveles récord de migrantes. La situación actual en esa que es la frontera norte de Estados Unidos, es tan política como peligrosa, pues entre Estados Unidos y Canadá no se había visto entrar a tantos migrantes ni el aumento actual de los cruces ilegales provenientes desde Estados Unidos, lo que generó que algunos políticos estén pidiendo cerrar una carretera rural en la frontera canadiense, donde personas provenientes de Afganistán, Angola, Zimbabue y otros países, llegaron al pase fronterizo de Roxham Road en Saint-Bernard-de-Lacolle, Quebec, el pasado mes de febrero y siguen entrando por ese lugar, donde ni el crudo invierno ha logrado contener la afluencia histórica de migrantes.
Es de mencionar que la cantidad de extranjeros entrando por la frontera sur de Estados Unidos es mucho mayor, pero diariamente está aumentando el número de personas que entran a Canadá.
En 2022, casi 40,000 migrantes, entraron a Canadá sin autorización —más del doble que en 2019—.
Según las autoridades canadienses, solamente en Enero de este 2023, ingresaron casi 5,000 personas, al país donde hay escasez de mano de obra y Canadá en una situación inusual, abrió sus puertas a los migrantes legales y afirmó que aceptará para el año 2025 a 1,5 millones.
El “país del maple”, con sus estrictas políticas de inmigración favorece a personas con educación y calificadas en su frontera única con Estados Unidos, y como nunca, enfrenta un problema similar a los de otras prósperas naciones occidentales: los cruces ilegales masivos por las fronteras terrestres.
Las leyes canadienses son claras: Si alguien entra irregularmente por un lugar que no es punto de entrada oficial, será interceptado y arrestado por la policía. Luego, deberá pasar por un riguroso proceso donde se determinará si su solicitud de asilo es legítima, de acuerdo con la ley canadiense e internacional.
PIDEN CERRAR EL PASO…
Ante dicha situación sin precedentes, los políticos de la oposición están exigiendo al gobierno que cierre el paso fronterizo de Roxham Road y señalan: “Quebec absorbe a muchos de los migrantes que entran ilegalmente a nuestro país, que no es un paquete vacacional con todo incluido”.
ESPERAN VISITA DE JOE BIDEN
Quienes entran a Canadá ilegalmente a través de Estados Unidos, están complicando seriamente la visita del presidente Joe Biden a tierras canadienses planeada para este mes, ya que tanto el mandatario estadounidense como el Primer Ministro Justin Trudeau enfrentan una creciente presión nacional por la inmigración no autorizada en sus fronteras y buscan se renegocie un Tratado con Estados Unidos (del año 2004), ya que consideran ha fomentado los cruces ilegales y se espera que el tribunal más alto de Canadá falle sobre la constitucionalidad de dicho documento, este verano.
LAS MEDIDAS…
Mientras tanto, en Roxham Road, los oficiales de la Real Policía Montada de Canadá, advierten a los migrantes que serán arrestados y acusados si entran sin autorización a su país, pero una vez que les levantan cargos, los liberan y después de unos meses empiezan a trabajar y recibir atención médica y otras prestaciones sociales, mientras se tramitan sus solicitudes de asilo. Los reciben en hoteles pagados por el gobierno durante largos periodos de tiempo, e inscriben a los niños en las escuelas públicas.
Trudeau ha dicho que el gobierno federal trabaja en la renegociación del Tratado y que planteará el asunto a Biden, mientras el gobierno estadounidense anuncia nuevas y severas medidas contra los migrantes que crucen ilegalmente a Estados Unidos.
Ante el aumento de quejas que señalan que Quebec carga injustamente con el costo de cuidar a los solicitantes de asilo, el gobierno federal trasladó a miles de migrantes a la provincia de Ontario, donde funcionarios locales protestan y afirman estar desbordados.
En Roxham Road, ahora se refugian cientos de solicitantes de asilo. Solamente al 37% de las 81,418 personas que han cruzado ilegalmente a Canadá desde febrero de 2017, les han aprobado sus solicitudes. A más del 34% se las rechazaron las abandonaron o las retiraron. Un 28% del papeleo sigue pendiente de aprobar o desechar.
Mientras la Corte Suprema sopesa el destino del añorado y añejo Tratado, los migrantes siguen pasando por Roxham Road, lo que ha intensificado las exigencias de su cierre, que de lograrse, obligaría a los migrantes a cruzar por puntos más peligrosos a lo largo de los casi 8800 kilómetros de la frontera canadiense con Estados Unidos. R/90
Martes 21 de marzo
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Internacionales
Josué Javier Hernández
Reporte90