LIC. JAVIER GARZA MORÚA

Sábado 28 de Diciembre, 2019. 10:51 p. m. (Mary Tovar).- La época navideña es esperada por muchos, especialmente por los ladrones, que sabedores de la entrega de los aguinaldos y otros estímulos laborales, buscan la oportunidad de cometer sus actos ilícitos.

El ex Secretario de Seguridad Pública de San Nicolás de los Garza Nuevo León, Javier Garza Morúa, destaca que de acuerdo a su experiencia, el robo a personas, los asaltos a bordo del transporte público, en las paradas de camiones, en el metro, cajeros automáticos, plazas comerciales, las farderas y los asaltantes en los negocios, las estafas y extorsiones pueden crecer en esta temporada hasta en un 30%: “En diciembre sí suben los robos a personas, a transeúntes, robo a negocios, aumenta un poco esos tipos de delitos, por motivo del flujo de dinero, es cuestión de andar con mucho cuidado”, detalla el ex funcionario nicolaíta.

Debido a lo anterior, recomendó a la ciudadanía hacer conciencia del peligro de contar dinero en la calle, del riesgo innecesario de llevar todo tu dinero contigo al salir de casa y aconsejó tomar algunas medidas para no ser parte de las estadísticas de robo: “No se debe llevar todo el efectivo en la bolsa al salir de compras, lleven sólo lo que se va a gastar, no usen joyería ostentosa, no usen cajeros automáticos en lugares solitarios o peligrosos, prefieran los que están en lugares públicos y no dejen a la vista el teclado a la hora de digitar el NIP, guarden los recibos para verificar después las operaciones efectuadas y denunciar cualquier anomalía. En esta temporada, por lo regular, la gente debe estar a la expectativa para no ser víctima de los delincuentes. Son varios los sujetos que salen a delinquir en las calles a buscar víctimas, deben cuidarse mucho de carteristas y “piñeros”. Hasta octubre de 2018 se habían reportado 1,804 casos de robo a persona y la tendencia de años previos nos ha demostrado que estos delitos incrementan durante Diciembre, por la llegada de los aguinaldos y en el caso de los negocios, las farderas, por el amplio flujo de clientes y el surtido extenso que realizan los comerciantes”. La temporada decembrina es una de las épocas más preciadas del año por los ciudadanos, pero también por la delincuencia organizada, así que más vale prevenir que lamentar”.

“Los carteristas son delincuentes especializados en el robo de carteras de bolsillo y otros objetos que llevan los ciudadanos, sin violencia y con la habilidad necesaria para evitar ser detectado su acto en los momentos inmediatos al hecho. Ellos analizan bien a sus víctimas, sobre todo turistas y ancianos. Deben prestar atención a sus pertenencias también quienes sean dormilones, mirones o presumidos”, dice Garza Morúa, quien agrega:
“Por lo regular este tipo de delincuentes analiza muy bien a sus víctimas, sus objetivos predilectos son turistas y ancianos.

Casi siempre, estas acciones se realizan en lugares con gran afluencia de público como es el centro de la ciudad, tiendas departamentales, las escaleras mecánicas del metro, o entradas a los vagones, en lugares de ocio como estadios de fútbol o zonas de bares.
Los rateros te rozan el bolsillo, así averiguan dónde está la cartera o el teléfono móvil, empujan, para que la víctima levante las manos y así acceder a sus bolsillos.
Están al acecho y aprovechan el descuido de su víctima cuando dejan la mochila abierta.
A veces, fingen una pelea, manchan la camisa o dejan caer monedas, para distraer a la persona y robarle sus pertenencias.
Algunos que se dedican a esto, usan a mujeres atractivas que se hacen las borrachas para manosear.
Los delincuentes también están cerca de los cajeros automáticos desde donde miran a la persona que está en el interior y está a la expectativa para cuando vaya hacer un pago o cuando vaya a guardar la cartera o el móvil.
Los carteristas son expertos en el arte del disfraz, sus preferidos son el de hombre de negocios, el de mujer con bebé, el de turista o el del hombre del gas. También suelen tapar la visión de la víctima enseñando un mapa o pasan por pasajeros que leen el periódico, a bordo de los camiones”.

A veces, el mismo taxista que te conduce al cajero automático, no se retira, hace como que se marcha, pero está cerca, cuando ve que abandonas el cajero, se acerca y ofrece llevarte de regreso, en el camino, saca un arma y te roba tu dinero.

Garza Morúa, experto en seguridad, explica: “Los llamados piñeros, siempre usan el engaño para poder quitar a sus víctimas el dinero que comúnmente acaban de retirar de las sucursales bancarias, por lo regular buscan a personas menos preparadas, a adultos mayores o personas desesperadas que buscan salir pronto de estos establecimientos. Son expertos sociólogos y consumados artistas. Cuando ven a su víctima necesitan sólo unos minutos de observación, para saber cuál es el papel de un humilde bracero que el de un acaudalado hombre de negocios; del mismo modo que saben explotar en su proyecto la avaricia de las personas, como su ingenuidad.
Casi siempre, operan uno, 2 o 3 para cometer su fechoría.
Uno de los delincuentes logra convencer a quien acaba de sacar su dinero del banco, le dicen que a cambio de su bolso le darían otro con más dinero. Cuando reciben el bolso, los delincuentes se retiran, la víctima emocionada de la transacción revisa el bolso que cambió y se da cuenta de que lo que recibió no es dinero, sino recortes de papel periódico.
En las últimas fechas, por ejemplo, se ha presentado una modalidad de estafa al momento de usar los cajeros automáticos.
Lo que hacen los delincuentes es que mediante engaños hacen creer a los usuarios que los cajeros no pueden leer sus tarjetas y se ofrecen amablemente a ayudarles a limpiar el plástico, pero en realidad lo que hacen es sustituir la tarjeta por una falsa y después hacer uso de la verdadera, antes de que sea reportada”.

LA CONDUSEF, OPINA:
Según la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF) y el Consejo Ciudadano de la Ciudad de México, esto es lo que debes tomar en cuenta al recibir el aguinaldo:
No comentar con extraños las fechas de pago del aguinaldo, salir en grupos de la empresa o fábrica para dirigirse a sus domicilios en el vehículo de algún trabajador, previa organización de la ruta de traslado, cobrar el aguinaldo en grupo sino lo depositan en medio electrónico y estar atentos a la salida del trabajo para identificar personas o vehículos sospechosos al exterior.
Al retirar dinero, utilizar los cajeros de bancos, supermercados, centros comerciales, estaciones de servicio u otros locales donde hay personal de seguridad o muchas personas.
No aceptar ayuda de extraños cuando estés en un cajero automático y trata de no utilizar aquellos cajeros automáticos estén en lugares poco iluminados, concurridos o aislados, sobre todo en la noche.
Desconfía de cajeros en los que aparezcan letreros o comunicados, ya que las instituciones nunca solicitan información confidencial a través de esos letreros. No aceptes ayuda de alguna persona, si es que el cajero presenta fallas, cancela la operación antes de retirarte.
No permitas que nadie te distraiga mientras te encuentras realizando tus transacciones. Al hacer compras, no lleves muchas tarjetas de crédito, ni todo el dinero, programa las compras, escoge cómo vas a pagar y sal de tu casa sólo con lo necesario.
No abras la cartera frente al cajero o cajera, ni dejando que alguien vea tus tarjetas o efectivo, si realizas compras por internet verifica que el sitio donde realizas la compra cuente con los candados de seguridad de compra en línea y que cuente con línea de contacto directo como un teléfono.

Los dueños de negocios de ropa y artículos varios, deberán poner especial cuidado también en estas fechas, pues por la cantidad de personas que se encuentren en los locales comerciales, será más fácil para las farderas, operar en perjuicio, sustrayendo mercancía diversa.

LOS TELÉFONOS CELULARES, PREFERIDOS POR RATEROS…

El robo de teléfonos celulares en el Estado, recientemente incrementó. La modalidad, es mediante asalto a mano armada. Lamentablemente en la mayoría de los casos, las víctimas son despojadas de su aparato telefónico y bastan unos segundos para que el ladrón se lleve el celular ajeno. Este delito es bastante frecuente en el centro de Monterrey, especialmente en estas fechas en que las compras de última hora permite una gran aglomeración de personas en calles y tiendas. Al delincuente no l e interesa que cerca de ti esté una gran cantidad de gente. Normalmente, el robo se realiza a plena luz del día, pero también al amparo de la oscura noche.

Juan Carlos Villarreal, titular de la Asociación Mexicana de Empresas y Servicios Prendarios, asociada con cerca de 200 casas de empeño en todo Nuevo León, afirma que Nuevo León es mercado grande y fácil para los ladrones. Además, menciona que hasta hace unos años, a las casas de empeño iban a dar la mayoría de los teléfonos celulares robados, pero aclara que ahora a través de un sistema especial, ningún celular se recibe en las casas de empeño sin revisar procedencia. Asegura que en su mayoría, las víctimas no denuncian los hechos.

La Fiscalía General de Justicia, reporta:

• Enero 2018 a Septiembre del 2019:Fueron robados dos mil 8 teléfonos móviles.
• Año 2018:Fueron robados mil 249 (aproximadamente 104 aparatos por mes).
• Año 2019: Enero a septiembre: Fueron robados setecientos 59 celulares (aproximadamente 84 aparatos por mes).

La Asociación Mexicana de Empresas y Servicios Prendarios (AMESPRE), reporta:

• Se empeñan 45 mil  teléfonos celulares al mes, pero el 3% de estos son rechazados por estar en la lista negra. Representa mil 350 aparatos al mes. El delito podría descender si el dueño del celular obtiene su código IMEI, bajando definitivamente la posibilidad de que el celular sea vendido después de ser robado. Con el IMEI, al presentar la denuncia a las autoridades, el teléfono queda totalmente bloqueado de forma inmediata y no podrá ser utilizado ni comercializado. Lamentablemente pocos usuarios tienen su código IMEI y son presa fácil de los amantes de lo ajeno, que tienen muy bien identificado los lugares donde es muy fácil cometer el delito, ya que ni la hora, ni la luz del día, ni el número de personas que esté cerca, es impedimento para cometer su delito. R/90