CUANDO LOS NIÑOS NO DESAYUNAN BIEN, NO TIENEN LA ENERGÍA Y VITALIDAD NECESARIAS PARA AFRONTAR EL ESFUERZO FÍSICO E INTELECTUAL QUE LES EXIGEN LAS ACTIVIDADES ESCOLARES.
Monterrey Nuevo León México, miércoles 23 de Mayo de 2018, 8:33 p. m. (Mary Tovar).- “Si los padres de familia envían a los niños a la escuela sin desayunar lo exponen a la desnutrición y a la obesidad infantil. Un niño que desayuna contra un niño que no desayuna, el último no tendrá rendimiento escolar completo y en cuanto a su salud, el hecho de saltarse el desayuno muy seguido, si es muy prolongado, puede empezar a descontrolar el metabolismo y empezaría a debutar con enfermedades degenerativas, pero además, un desayuno no adecuado, hará que los niños sientan a media mañana la necesidad de un gran aporte energético, que podrán encontrar en productos de alto contenido en azúcar y ácidos grasos. En este caso, al saltarse una comida tan importante como es el desayuno, mal acostumbramos a nuestro cuerpo, empezamos a descontrolarlo. A veces es por falta de tiempo, prisas o retrasos. Algunas familias prescinden de dar de desayunar a sus hijos en casa, pero si hacemos el desayuno en algún momento y otros días no, no somos regulares, no podemos decir voy a durar toda mi vida sin desayunar, porque eso también lleva consecuencias a la salud, pero si estamos también en la irregularidad, entrenamos a nuestro cuerpo contra nosotros mismos, porque básicamente lo que va a hacer es almacenar energía. Los depósitos que tenemos son los de grasa, el desayuno de los niños es la comida más importante del día. Un desayuno equilibrado para los niños es el compuesto por leche y fruta”, afirma el Dr. Netzahualcóyotl Díaz Ureta.
Por su parte, el Instituto Mexicano del Seguro Social recomienda a los padres de familia iniciar ya con el sano hábito de enviar a sus hijos a la escuela ya desayunados y evitar que en la calle consuman comida chatarra.
La Dra. Aracely Margarita García Hernández, del IMSS, puntualiza: “Aunque no todas las familias tienen tiempo para preparar el desayuno y consumirlo en el hogar, es posible que a los menores les preparen un refrigerio, lonche, para que lo consuman en el recreo, puede ser pan integral untado con mantequilla, frijoles molidos, lechuga, cebolla y queso panela, que deberá consumir con agua natural evitando los refrescos o bebidas endulzadas, agregar fruta o verdura picada, manzana, jícama, zanahoria o pepino, en lugar de pan dulce o galletas, algo ligero y no caer en el error de provocar sobrepeso u obesidad. El hábito del desayuno permite la convivencia familiar en la mañana, da oportunidad a todos los integrantes de compartir una alimentación sana y con los nutrientes necesarios para desarrollar las actividades del día con suficiente energía. El menú puede contener huevo, carne, queso, verdura, una o dos tortillas, un vaso de leche sin saborizantes ni colorantes y una fruta para combatir desde el hogar y la familia, adquirir enfermedades crónico-degenerativas como el sobrepeso, la obesidad, hipertensión arterial o diabetes mellitus (…)”, enfatizó. R/90