El río Rin ha sido un importante afluente de Europa. Recorre parte del territorio de Suiza, Austria, Liechtenstein, Alemania, Francia y Países Bajos. Su cuenca ocupa 185.000 km2. Sobre ella, habitan 58 millones de habitantes.
Es la vía fluvial más vital de la Unión Europea por la intensa actividad comercial generada en sus riberas y el tonelaje de mercancías y materias primas que se transportan por sus aguas. Es un medio excesivamente indispensable para la integración de los países que conforman el bloque de forma local y un motor que impulsa su competitividad de talla internacional.
Su cauce se ha categorizado como un río mundial, Sus aguas bañan parte del territorio de 6 países desde su nacimiento hasta su desembocadura.
En algunos tramos, las aguas del Rin sirven de frontera entre naciones vecinas como en el caso de Suiza y Liechtenstein, Suiza, Austria, Francia y Alemania.
En 1868, en la Convención de Mannheim se oficializó la determinación de río internacional para el Rin, garantizando mediante este acto el paso libre de Suiza al mar del norte. Cuenta con 883 kms navegables, conectando las economías de los 6 países que pasa en su camino al mar, con la presencia de múltiples puertos.
Hay evidencias arqueológicas y documentales que demuestran que antiguamente, los romanos navegaron sus aguas desde el 58 a. C. para sacar provecho estratégico de su posición, fomentando el comercio a través del transporte de suntuosos materiales de construcción como el mármol.
Actualmente, los envíos de productos energéticos e industriales se han visto perjudicados por la sequía del río Rin, el más importante de Europa, ya que se está secando.
El río Rin está por volverse intransitable en un punto comercial clave para Alemania, a medida que las aguas poco profundas obstruyen los envíos de productos energéticos y otros básicos industriales a lo largo de una de sus vías fluviales hasta la fecha, las más importantes de Europa.
El marcador en Kaub, al oeste de Fráncfort, está pronosticado para caer el 12 de agosto a una profundidad crítica de 40 centímetros, según la Administración Federal de Vías Navegables y Navegación de Alemania. A ras, resultará imposible que transiten la mayoría de las embarcaciones que transportan mercancías desde diésel hasta carbón y se pronostica que el marcador seguirá cayendo a 37 centímetros al día siguiente.
Así, Europa se enfrenta a la peor crisis de energía en décadas, Rusia retiene los flujos de gas natural y aumenta las tensiones en la región con su invasión a Ucrania. Eso ha ocasionado que los precios se eleven y las empresas utilicen más petróleo y carbón en su lugar. La crisis energética alcanzó a la economía en general, elevando los costos de producción y amenazando con llevar a las economías más grandes del continente a un retroceso económico.
Las barcazas de aguas poco profundas todavía podrán navegar por el río Rin en Kaub, la disminución del nivel del agua ilustra cómo la crisis climática está agravando los problemas energéticos de la región. Los precios de referencia de la energía de Alemania alcanzaron nuevo récord el miércoles.
Utilizado por barcos para transportar productos básicos, el Rin serpentea alrededor de 1,300 kilómetros desde su origen en lo alto de los Alpes suizos por algunas de las zonas industriales europeas más importantes antes de desembocar en el mar del Norte cerca de Róterdam. La mayorí empresas, como es el gigante químico BASF SE y la siderúrgica Thyssenkrupp AG dependen del río Rin para abastecer de combustibles y materias primas a las principales plantas industriales.
Según el Servicio Meterológico Federal Suizo, una mezcla de escurrimientos glaciares y la lluvia alimentan el río, pero dichas contribuciones han disminuido en los últimos años a medida que el derretimiento del verano supera a la formación de hielo en invierno debido al cambio climático.
De acuerdo con un representante del Instituto Federal de Hidrología de Alemania, “Las nevadas muy por debajo en promedio del invierno pasado y el frecuente desgaste de los glaciares, denotan que es muy probable que la vía fluvial caiga a niveles de crisis, debido a que cuando el marcador en Kaub alcanza los 40 centímetros o menos, se vuelve antieconómico para la mayoría de las barcazas que navegan más lejos. Eso detiene efectivamente el flujo de la mayoría de los envíos más allá de ese punto”.
Los envíos ya se han visto frenados durante varias semanas, pir el bajo nivel de agua que lleva el río y limita la cantidad que pueden transportar las barcazas. La tarifa para transportar algo de combustible a Basilea en Suiza es ahora de 267 euros (US$276) la tonelada, en comparación con los 25 euros que cobraban por tonelada a principios de junio, revelan cifras de Insights Global.
El pasado miércoles, vía telefónica, un funcionario de la Agencia Estatal alemana de vías fluviales, especificó: “Las barcazas aún están pasando el cuello de botella clave en el río Kaub. Espero que continúen operando hasta que el marcador Kaub caiga unos 20 centímetros desde los niveles actuales, de lo contrario, los bajos promedios de agua podrían convertirse en un dolor de cabeza para BASF y empresas energéticas como EnBW AG y Uniper SE. Cabe mencionar que esta última recibió recientemente un rescate de US$17.000 millones del Gobierno alemán para evitar un colapso de su red de energía. Las compañías aún podrán abastecer fábricas y plantas de energía por carretera o ferrocarril, pero esos modos de transporte son significativamente más caros, lo que lleva a una reducción de los márgenes (…)”, lamentó.
Por ahora, la profundidad del río es de 173 centímetros con 150 centímetros como el nivel que hace que salga muy caro el transportar carbón coquizable, mineral de hierro u otros materiales, en barcazas.
El calor estacionado y la falta de lluvias en Europa y América muestran escenarios casi apocalípticos, con graves consecuencias para fauna, economía y población. R/90
Jueves 11 de Agosto 2022.
Internacionales
Nora Hernández. R/90