La noche de ayer, agentes de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) detuvieron a Fernando Cuevas Murillo, esposo de la recién nombrada magistrada Paola González Castañeda, acusado de violencia familiar y amenazas.
Según la orden dictada por un juez en Monterrey tras una denuncia presentada en septiembre pasado, los cargos imputados son graves.
El arresto se concretó en un hotel de la colonia Rincón del Valle (para sorpresa de propios y extraños) y el detenido fue trasladado directamente a un penal estatal mientras se resuelve su situación legal.
El escándalo no ha pasado desapercibido: miles de personas en redes sociales reaccionaron con indignación, y se generaron acusaciones de posible irregularidad durante la detención. Incluso familiares del detenido denunciaron un supuesto montaje.
