El Gobierno de Estados Unidos lanzó una advertencia directa a quienes portan la visa de turista B1/B2, ya que usarla fuera de lo permitido puede derivar en remoción inmediata y cancelación del documento, sin necesidad de condena penal.
Las autoridades recordaron que la visa de visitante permite viajar por turismo, vacaciones, compras, visitas a familiares o amigos, asistir a reuniones de negocios, convenciones y conferencias sin pago, pero dejaron claro lo que está estrictamente prohibido: el llamado turismo de parto (viajar con el objetivo principal de que el bebé obtenga la ciudadanía estadounidense), trabajar o recibir pago, estudiar para obtener créditos o títulos académicos y realizar presentaciones remuneradas.
Hace unas semanas, el vocero de la Embajada de Estados Unidos en México, David Arizmendi, subrayó: «La visa es un privilegio, no un derecho, y puede ser revocada en cualquier momento. Estados Unidos cancelará cualquier visa cuando existan razones para hacerlo, sin importar quién sea el titular”, afirmó el funcionario en un mensaje difundido por la Embajada y los consulados en México.
El Departamento de Estado, -explicó-, revisa de manera constante las visas ya otorgadas y puede cancelarlas si considera que no conviene a los intereses del país, incluso sin una sentencia judicial. Por motivos de privacidad, estas decisiones no se hacen públicas y se notifican directamente al afectado»; enfatizó.
La advertencia es clara: cruzar la línea con la visa de turista puede cerrar la puerta de Estados Unidos. R/90
