YA PODRÁN DECIR QUE SALIERON VIVOS DE UN DESASTRE AÉREO LOS PASAJEROS DEL AVIÓN DE AEROMÉXICO QUE SE DESPLOMÓ AYER POR UNA VENTISCA Y GRANIZO, CUANDO INTENTABA DESPEGAR DEL AEROPUERTO DE DURANGO, HACIA LA CIUDAD DE MÉXICO. EL AVIÓN PERDIÓ DOS MOTORES Y SE INCENDIÓ, PERO HUBO MANERA DE QUE TODOS, PASAJEROS Y TRIPULANTES, BAJARON POR SU PROPIO PIE PARA PEDIR AYUDA A LA GENTE QUE PASABA CERCA, POR UNA CARRETERA.
Monterrey Nuevo León; Miércoles 1 de Agosto 2018, 4:03 p. m. (Javier Hernández Ledesma).- Carlos Galván Meyra, lesionado, no dudó en ayudar a las personas heridas a consecuencia de la caída del avión que piloteaba, problema debido a una ráfaga de viento, les ayudó a salir de entre fierros retorcidos y llamas de lo que había sido el avión y cayó en Durango el martes 31 de julio.
Ciento dos personas le deben la vida a este valeroso piloto, ya que gracias a su destreza, realizó el aterrizaje forzoso que, en otras condiciones, pudo ser fatal.
El piloto aviador de 38 años es técnico Superior Universitario, vive en la Ciudad de México, es fan de Luis Miguel, de las alturas y de los aviones. Tiene 8 años trabajando en Aeroméxico.
Los testigos señalan que, gracias a su pericia y el apoyo de su tripulación, se evitaron pérdidas humanas. R/90