Monterrey Nuevo León, jueves 15 de noviembre 2018, 6:30 p. m. (Mary Tovar).- El pasado 7 de noviembre se celebraba una asamblea comunitaria en el pueblo de Chavajeval, municipio “El Bosque”, en Chiapas.
Repentinamente; se escuchó una detonación, luego varios disparos. El recuerdo de una emboscada ocurrida dos semanas antes, en la que 2 hombres fueron asesinados, provocó que los asistentes huyeran buscando refugio, pero no en sus casas, sino fuera de la comunidad: la población completa salió de ahí, dejando atrás, un pueblo fantasma.
Unas 2,000 personas pasaron esa noche moviéndose hacia la montaña, buscando senderos. Se dirigían a la cabecera municipal de “El Bosque”, buscando estar seguros.
El rumor del éxodo y de la violencia que lo provocó llegó a oídos de los sacerdotes Manuel Pérez y Helder López, quienes acudieron a Chavajeval y se encontraron con un pueblo semidesierto, donde todavía estaba un cuerpo en avanzado estado de descomposición, sin algunas partes que ya habían sido devoradas por animales.
De acuerdo con López Velasco, a su paso hallaron también algunas familias que permanecieron ocultas en el pueblo y no habían salido en 3 días ante el temor de otro ataque armado.
Una persona les comentó que tenian 4 días sin comer. En otro punto hallaron a una mujer de 110 años que les dijo andaba extraviada, luego de la partida de toda la comunidad.
Los clérigos se los llevaron a la cabecera municipal y les ofrecieron atención médica y refugio. Este desplazamiento forzado se suma a otros que están ocurriendo en el Estado de Chiapas, a consecuencia de frecuentes ataques armados que los campesinos no pueden repeler.
“Hasta ahorita no hay claridad, dicen que ya están investigando, pero todavía no hay nada. La comunidad andaba investigando sobre la muerte de estas dos personas y surgieron disparos por varias partes. Ahí fue donde todos los habitantes se dispersaron y se fueron por temor de ser asesinados. No saben quién les dispara ni porqué, por eso se están yendo de su tierra”, dice el padre Helder López .
El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas estima que son mil 764 los indígenas tzotziles que huyeron del poblado, aunque el padre calcula más de dos mil.
Casi ninguno habla español, según el párroco, y nunca antes habían tenido un éxodo de esta magnitud, en el que todo el pueblo huyera de una sola vez.
El Fray considera que el poblado de Chavajeval vive una crisis humanitaria urgente, pues estas personas requieren un lugar seguro donde resguardarse, alimentos, atención médica y medicinas.
La crisis también ha fragmentado temporalmente a las familias, pues los desplazamientos dispersos hacia comunidades de los municipios de Chalchihuitán, Simojovel y San Cristóbal de Las Casas provocaron la separación de grupos familiares que se encuentran buscándose entre sí, advierte el Fray.
En las montañas continúan cerca de 500 personas desplazadas, “sin abrigo, techo, ni medicamentos, en su mayoría son mujeres con sus hijas e hijos”
De esas mujeres, agrega, cuatro estaban embarazadas al momento de huir y una ya tuvo el parto en la montaña. También están dos niños solos y dos personas de 80 años.
En cambio, el pueblo de Chavajeval no tiene actividad humana desde hace días, según el Fray: “Las casas se encuentran abandonadas sin daño alguno, en los corrales algunos animales han muerto, pero no hay saqueos”.
Este desplazamiento masivo ocurre al mismo tiempo que otros registrados en meses recientes en los Altos de Chiapas, zona predominantemente indígena y de origen tzotzil. El más reciente es el del municipio de Aldama, de donde han salido unas 780 personas ante el temor de ser baleados por paramilitares que les disputan un territorio cafetalero y les disparan apenas salen a cosechar su café.
Los sacerdotes han urgido al gobierno estatal a intervenir para cesar los ataques armados de paramilitares, autodefensas y el crimen organizado contra los pueblos indígenas, que al no poder defenderse abandonan sus pueblos y todo lo que tenían en ellos.
De acuerdo con la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, en 2016 se registraron 29 episodios de desplazamiento interno masivo en México, 20 de los cuales fueron causados por la violencia. La mayor parte ocurren en 12 entidades del país: Chiapas, Chihuahua, Durango, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Oaxaca, Sinaloa, Tamaulipas, Veracruz y Zacatecas. Estamos ante una emergencia nacional.R/90